Las empresas deben adoptar un enfoque vigilante

Hoy en día, no hace falta mucho esfuerzo para que personas ajenas a una empresa encuentren bases de datos no seguras y accedan a información confidencial. Desde los problemas de configuración de la nube, que exponen grandes cantidades de datos confidenciales en línea, hasta los ataques de ransomware que afectan gravemente a las infraestructuras críticas, este último año ha puesto de manifiesto la falta inherente de una seguridad proactiva en las empresas de todos los tamaños.

A medida que aumenta la sofisticación y la frecuencia de los ciberataques, las empresas deben estar preparadas para hacer frente a la evolución del panorama de las amenazas con el fin de proteger a sus empleados, su infraestructura y los datos confidenciales.

Para mitigar el impacto y la interrupción de la actividad que provocan los ciberataques, las empresas deben valorar la posibilidad de implementar un marco de Confianza Cero, que garantice que solo los usuarios autorizados puedan acceder a su red. Además, las plataformas unificadas de seguridad en la nube, como el perímetro de servicios de acceso seguro (SASE) y el perímetro de servicios de seguridad (SSE), pueden proporcionar una visibilidad y un control completos en todo el ecosistema de TI, al tiempo que brindan una protección avanzada contra las amenazas. Ofrecer formación exhaustiva en ciberseguridad a todos los empleados, contratar a expertos en seguridad, y supervisar y mejorar continuamente las posturas de ciberseguridad también garantizará que las empresas estén debidamente preparadas para proteger sus operaciones modernas.

El Día Internacional de la Seguridad de la Información (30 de noviembre) sirve de recordatorio para que las empresas hagan de la seguridad un imperativo estratégico. Al adoptar un enfoque vigilante respecto a la seguridad, las empresas pueden garantizar con confianza que los datos confidenciales del negocio, de los empleados y de los clientes están protegidos de forma granular.

Anurag Kahol de Bitglass